Plueblo divertido

 

PUEBLO DIVERTIDO

Hace varios años, había  un pueblecito que se llamaba Usansolo. Estaba a lo lejos de las ciudades y otros pueblos, en el que los aldeanos eran todos felices. Bajaban todos los días con los amigos, con sus padres…

Se reían todos todos los días. Se divertían hasta que un día cualquiera cambió todo en ese pueblo. Y todos estaban en sus casas metidos con miedo, angustia y tristes.

Ese día fue especial, impresionante, nunca lo habían visto. Un chico raro entró al pueblecito. Tenía una varita roja, una capa negra, vestía un esmoquin y también un gato en los hombros con una cabeza peluda y las garras muy grandes para arañarte.  De pronto, alzó las manos y dijo:

- Hola, saludos a todas y a todos.

Los aldeanos se quedaron con la boca abierta porque en cinco años nadie salía ni entraba del pueblo.

El chico que entró tenía mala pinta, parecía un mago malvado y tenía una mirada horrorosa.

Al poco tiempo las cosas cambiaron porque el mago convirtió a casi todos los del pueblo en animales: elefantes, jirafas, gatos…

Una pequeña jovencita estaba en su cama dormida y no se convirtió en animal. Entonces le llamó a su padre que estaba en el pueblo de al lado, para comprar comida. El padre vino corriendo para salvar el pueblo con su hija pequeña. Él intentó contactar con otros magos pero que eran buenos para intentar hacer una pócima para cambiarles a los humanos. De repente vinieron los tres  magos que eran buenos y les intentaron cambiar de animales otra vez a humanos para salvarles la vida. Al fin y al cabo,  si están más de dos días se mueren porque no son animales normales atacaban mucho.

Después de días y días encontraron la pócima que les volvía otra vez humanos y entonces las cosas cambiaron para siempre. El mago escapó del pueblecito y se fue a una isla desierta. Desde entonces  no sabemos si está vivo o muerto porque nadie contacta con él para que no le maten o vayan a la cárcel para siempre . De esa forma también,  los aldeanos se convirtieron otra vez en humanos. Y volvieron a ser felices, divertidos y todo. Aunque están con un poco de miedo por si les vienen.